Las placas de identificación que realizamos pueden ser entre otras cosas grabadas. El grabado de todo tipo de formas, letras y dibujos es un complemento perfecto para un identificador.
Las placas personalizables nos permiten poner todo lo que queramos desde logos a simples nombre dando al gafete una forma única y original.
Las placas de identificación de solapa son asequibles a todo los bolsillos y fáciles de llevar. En este caso hemos una chapa identificativa con esquinas redondeadas y con un material bicapa que nos permite grabar en azul un badget que en un principio parece blanco. Este tipo de identificador personal es ideal para hospitales, clínicas, geríatricos, dentistas…
Los grabados son como las joyas, para toda la vida. Un grabado siempre queda bien, da estatus y categoría. Lo único malo de un portasolapas grabado es que no es reutilizable. Se puede poner el nombre de la empresa sin incluir el del portador del solapero de esa forma sí que podemos tener un identificador como quien diría para toda la vida.
El grabado a láser de una calidad perfecta. Desde letras gruesas hasta más finas. Para trabajos exigentes es la mejor forma de grabar y no la más cara.